Silas Marner. George Elliot
Dentro de mi reto #12meses12clasicos que me he propuesto en 2025, en abril me he enfrentado por primera vez a George Elliot (Reino Unido, 1819-1880), adentrándome en la novela victoriana.
"Silas Marner" (1861), ambientada en la campiña inglesa, narra en tres actos la vida de Silas Marner.
En la primera y breve parte, Silas es un joven religioso y respetado por su comunidad, al que la vida le sonríe aparentemente hasta que la traición de su mejor amigo le obliga a abandonarlo todo y huir del mundo. Deja atrás a su prometida, a sus vecinos y a su traidor amigo, manchada su honorabilidad por un supuesto robo del que nunca formó parte.
Su huida le lleva a Raveloe siendo un joven, donde se convierte en un huraño y solitario tejedor, obsesionado por el dinero que va consiguiendo de tejer, temeroso de todos sus vecinos y aislado de todo contacto innecesario. Amasa su fortuna cada noche, a la luz de una vela.
Muchas años después, cuando su vida se reduce a tejer y contar monedas, una noche cambia radicalmente su vida. Dunstan, un señorito alocado y malcriado, que vive de sisar a su familia y de pequeñas estafas, acuciado por las deudas, roba los ahorros de Silas. Éste, desesperado ante la pérdida, recurre al pueblo. Todo el mundo le tachaba hasta el momento de engendro, bicho raro y ermitaño. Pero la tristeza y desesperación de Silas les remueve la conciencia y deciden ayudarlo. Empieza así la vuelta a la civilización del señor Marner. Vuelve a ser aceptado en una comunidad.
Años después, y sin haberse descubierto al culpable del robo, llega a su vida Eppie, empezando así la tercera parte de la novela. Es un bebé de dos años, que gatea por la nieve para salvar su vida, alejándose de la muerte que ya ha alcanzado a su madre, Molly. Es la amante y esposa oculta de Godfrey, hermano de Dunstan y uno de los señoritos más respetados de Raveloe.
El secreto de Godfrey, que está atado a Molly, chantajeado por Dunstan y amargado, queda en suspenso cuando Silas adopta a Eppie. Godfrey se libera así de su hija y de Molly, pudiendo casarse con Nancy, su amor, una joven respetada por Raveloe.
Silas recibe a Eppie como un milagro, que le llena tras años sufriendo por la pérdida del dinero. La cría como a una hija. Se olvida del dinero, se integra en Raveloe y es feliz.
Años más tardes, aparece el cadáver de Dunstan en un pozo cerca de la casa de Silas, al que cayó tras robar a Silas. El dinero está allí. Godfrey se arma de valor, confiesa su paternidad y pretende recuperar a Eppie.
Pero ésta, fiel a su verdadero padre, renuncia a una posible opulenta vida junto a Godfrey, quedándose con Silas y casándose con Aaron, un humilde pero responsable jardinero.
Una novela costumbrista, de drama y tragedia para el protagonista, de sucesivos infortunios. Predecible, aunque entretenida.
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