Luces del Norte. Philip Pullman

 Después de ver la serie "La materia oscura", me picó la curiosidad de ver el enfoque que daban los libros que la originaron, respecto de este mundo de fantasía de universos paralelos, religión, almas y materia oscura.

Tras leer el primer volumen de la trilogía, "Luces del Norte", concluyo que la serie es muy fiel a la obra y que no la desmerece en absoluto.

Lyra, una niña destinada a jugar un papel clave en la eterna lucha entre el bien el y el mal, se cría en un college en Oxford, en un mundo paralelo al nuestro, ajena a su pasado. Allí crece, como una niña despierta, alegre y traviesa, junto a su amigo Roger y su daemonium Pan. Y es que en este mundo las personas tienen un vínculo con su alma físico, visible, palpable, en forma de un animal al que están vinculados toda la vida.

Un día, su tío Ashriel llega y se desencadena la historia, en la que se entremezcla el conservadurismo de la Iglesia, denominada Magisterio, la desaparición de niños para experimentos, la búsqueda de una puerta hacia otros mundos, el viaje al lejano y salvaje norte o la alianza con osos polares que hablan, razonan y tienen poder real en el mundo.

Aparece la madre, la señora Coulter, mala malísima, una mujer sin escrúpulos que se mueve como pez en el agua en las esferas de poder patriarcales. El tío tampoco es lo que dice ser, y es un personaje igualmente egoísta y ambicioso.

Poco cariño familiar junto a Lyra, que construye su familia en torno a Pan, un oso acorazado, un aeronauta, su incondicional Roger y los giptanos.

Ashriel ansía llegar a esos otros mundos, construir un puente entre mundos que le permita destruir el poder opresor del Magisterio. Aunque el altruismo no es tal y nada es lo que parece cuando de Ashriel se trata.

Brujas, objetivos mágicos, globos aerostáticos, criaturas maléficas, se entremezclan con religión, política, ciencia, dando forma a la clásica lucha del bien y del mal, a la ambición sin límites, dando forma a una historia con una heroína, Lyra y un enemigo, las creencias y el ansia de retener el status quo y el poder a cualquier precio.

Después de ver la serie, es imposible desligarse de los personajes. Un libro entretenido de literatura de fantasía juvenil.